Mi corazón llora porque no te encuentro,
Quiero conocerte y que mi corazón se acelere y me diga que eres tú,
Que cada dia te quiera más que ayer
Que seas tú quien haga que mi corazón no deje de latir
Mi corazón derrama sangre negra porque no te encuentro,
Quiero ver tu mirada y que me diga que eres mio,
Que tu voz me susurre que quieres pasar el resto de tu vida junto a mi
Que el dia que te haya conocido, cuando piense en ti mi corazón no deje de latir.
Gris, ese es el color que veo ahora. Sentimientos que han revivido en lo más profundo de mi corazón, están a flor de piel. A veces nos paramos a conversar con alguien que apreciamos y van surgiendo pensamientos, recuerdos que no habían salido a la luz, y que en esa conversación florece. Esa persona que te escucha, está ahí que sabes que a pesar de los pesares, si empiezas a llorar no te va a dar vergüenza porque lo que más necesitas en ese momento es sacar esas lágrimas negras que estaban en el fondo del corazón, y dejar que ese corazón se alimente de lágrimas verdes llenas de esperanza, ilusión y felicidad.
Qué fácil es explicar la vida en cinco minutos y la de tiempo que hemos necesitado para poderla explicar.
-------------------------------------------------------
Qué bonito es soñar, poder ver la luna y mirarla, que el tiempo se detenga en ese preciso instante. Diferentes momentos del pasado que se manifiestan, más tristes que alegres y tus ojos empiezan a derramar lágrimas sin saber el motivo y dejas que fluyan, crees que no hay nadie a tu alrededor pero miras hacia el cielo y ves que esa luna te sonríe - le dice un secreto al viento-. Esa noche no hay nubes, pero hace un poco de aire, y en un momento que el viento disminuye su velocidad te susurra que mires a la luna y la mires. Entonces es cuando sacas todas tus fueras, subes la mirada hacia ella, le sonríes y dices: “ahora veo la vida de otro color, gracias”. Es momento de volver a casa, es tarde, hace un poco de frío y mientras los zapatos roza el cemento de la calle hay recuerdos que vienen y van, pero la luna te está mirando, te observa, la vuelves a mirar y esa sonrisa no es melancólica, ha cambiado, es más agradable de mirar. Tu cuerpo camina de manera diferente, con más soltura, más elegancia, más seguridad en el andar, en mirar a tu alrededor y saber que la luna está contigo, te acompaña y te alumbra el camino de vuelta a casa.
-------------------------------------------------------
Gràcies Brain Jiménez per deixar-me plorar i comprendre’m. Gràcies per la conversa que hem tingut fa uns moments. Me n’alegro de haver-te conegut i saber que Deu ens ha criat i nosaltres ens em ajuntat ;-)
